Flora Ruchat-Roncati, “la Poetisa del Concreto” como la llama el periódico Le Temps (Parzer, 2014), nació en Riva San Vitale, Suiza, en 1937. Representante de la denominada “Escuela de Ticino”, su obra arquitectónica se fundamenta en la lectura del sitio y la realización de un balance entre el contexto urbano y rural.